Reseñas de Diciembre/Enero: Alias Grace + The End of the F***ing World + Black Lightning + Bright + Punisher + Manhunt: Unabomber
Para ponerme al día y no dejar reseñas colgadas como hago siempre, decidí hace un mix resumido de cosas que vi en estos meses de verano. Acá están, estos son los afortunados ganadores (?)
Esta serie está basada en una novela de Margaret Atwood, quien a su vez se inspiró libremente en un caso real. En 1843 el adinerado Thomas Kinnear y su ama de llaves Nancy Montgomery fueron salvajemente asesinados. Ahí tenemos el único dato que es absolutamente cierto. Los acusados fueron James McDermott y Grace Marks, una sirvienta de tan sólo 16 años. McDermott fue a la horca, pero Grace pasó más de treinta años en la cárcel. ¿Acaso planeó todo? ¿Era una víctima inocente o una asesina fría y calculadora? ¿Estaba loca o poseída? A lo largo de seis capítulos Grace nos va contando su desafortunada historia, llena de malos tratos, injusticias y abusos. Lo interesante de esta serie es que nunca podemos estar seguros de si Grace dice la verdad o no, ya que sólo contamos con su testimonio y no quedan testigos. La re, re, re recomiendo. La trama está llena de suspenso, la caracterización de los personajes y de la época es superior, y la actriz que interpreta a Grace está INCREÍBLE. Posta. La miré de un tirón porque es absolutamente magnética. Pueden ver el trailer subtitulado acá.
Calificación:
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Si tienen ganas de estar tristes, esta serie es para ustedes. Basada en una aclamada novela gráfica, The End Of The F***king World nos cuenta la historia de James, que está bastante seguro de ser un psicópata, y Alyssa, una adolescente a la deriva que busca problemas todo el tiempo. Al principio James se acerca a ella con la intención de matarla, pero luego las cosas se complican y empieza a tener sentimientos, algo muy poco útil cuando estás intentando matar a alguien. Confieso que la empecé a ver con ciertos reparos porque temí que fuera la típica huevada juvenil que romantiza los trastornos psicológicos (te estoy mirando a vos, 13 Reasons Why, y a vos, Suicide Squad), y que cree que términos como "bipolar", "depresión" y "esquizofrenia" son formas de describir un estado de ánimo. Nada que ver. Los problemas de los chicos están contandos con sensibilidad, sin golpes bajos pero con muy buen ritmo, la banda sonora es realmente fantástica y los actores tienen mucha química. Tiene un final ambiguo (podría haber una segunda temporada o no, dependiendo de cómo lo interpreten) y obviamente por como viene la mano sabemos desde el principio que no puede ser feliz. Me divertí y me enternecí con su viaje. Recomendadísima por su calidad y porque es cortita (sólo ocho episodios de 20 minutos cada uno). Pueden ver el trailer subtitulado acá.
Calificación:
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Black Lightning es un superhéroe de DC que ha caído en desgracia más de una vez, pero parece que ahora encontró su lugar. Basada en el cómic del mismo nombre, la serie nos cuenta la vida de Jefferson Pierce, un respetadísimo miembro de la comunidad de Freeland. Al comienzo de la historia nos enteramos que hace nueve años Black Lightning colgó el traje y se dedicó a mejorar las vidas de los ciudadanos de otra manera: no sólo es un padre ejemplar, sino que también es el respetado director de la escuela con más graduaciones de la zona y el único que mantiene un arreglo con las pandillas para que no ataquen en la zona escolar. Pero la violencia, las drogas, la trata de personas y la ineptitud de la policía empiezan a hacer de su barrio un infierno, y lo obligan a volver a luchar con la máscara puesta. Es menos Black Panther y más Luke Cage meets The Wire, si entienden lo que quiero decir. Si bien tiene algunos momento clase B (mayormente relacionados a los efectos especiales y algunos diálogos cursis), Black Lightning no tiene miedo de ser crudo y mostrar el lado feo de las cosas: discriminación entre personas de una misma etnia, tiroteos en las escuelas, prostitución forzada y una policía profundamente racista. En el momento en que escribo esto sólo salieron dos episodios, pero ya estoy enganchada y esperando por más. Como dato de color les comento que el villano es un actor negro que es albino, lo cual me resulta interesante porque es muy raro que los albinos tengan alguna representación en la pantalla, chica o grande, y da pie a interesantes reflexiones sobre lo que es ser negro o blanco en una sociedad tan violenta como esa. Pueden ver el trailer subtitulado acá.
Calificación:
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Urban fantasy es un género que a mi me encanta pero que hasta ahora no ha sido demasiado popular en cuanto a las adaptaciones audiovisuales. Lamentablemente Bright no es la película salvadora que yo esperaba. El punto de partida es bueno: elfos, humanos, orcos, enanos y otras razas salidas de LOTR conviven no tan pacíficamente en la ciudad de Los Ángeles. La corrupción, la delincuencia y las peleas entre bandas están a la orden del día, y falta poco para que todo explote. La trama es mitad Bad Boys/mitad película genérica sobre un elegido con poderes mágicos, y hasta ahí no tengo ningún problema, me gustan las de acción y las épicas así que para mí es un win-win. El tema es que caen en el mismo error que muchos otros: en vez de hacer una buena película con una trama sólida, que sea autoconclusiva, meten todo a presión, así nomás, y esperan que les vaya lo suficientemente bien como para hacer una segunda parte y ahí resolver todo. Eso fue lo que le pasó a The Amazing Spider-Man 2: Rise of Electro. Hicieron una secuela tremendamente floja porque estaban seguros de que la tercera parte ya estaba confirmada, y les fue tan mal que la cancelaron y dejaron todo a medias. Bright sería una muy buena serie, pero como película individual se queda corta. Ojo, esos no son sus únicos problemas. También hay otras cuestiones. Una, por ejemplo, es la normalización de la brutalidad policíaca. En un momento el personaje de Will Smith le pregunta a su compañero, el único polícia orco de la ciudad, repudiado tanto por sus compañeros como por los otros miembros de su raza, si realmente quiere ser un policía antes que un orco. El tema es que se lo pregunta mientras ambos ven como un grupo numeroso de agentes le da una paliza terrible a un orco tirado en el piso. ¿Qué pasa, para ser un policía hay que ser un hijo de puta? Parece que sí, porque la película da a entender que sólo podés optar por ser una cosa a la vez, y que ser parte de las fuerzas de seguridad implica abusar de tu poder. En fin. Otra cosa que me irritó fue que el personaje de la elfa Tikka es CALCADO de Leeloo, la protagonista de El quinto elemento. Es tan parecido que me da vergüenza ajena. No hay una justificación para que se comporte de esa manera, y encima a la mitad de la película descubrimos que puede hablar perfectamente. No hay ninguna explicación al respecto. Un hechicero lo hizo, supongo ¯\_(ツ)_/¯
En fin, lo más rescatable de la película es Noomi Rapace haciendo de villana. Es una lástima porque la idea es buena, pero la ejecución es flojísima. Veremos que pasa con la segunda parte, que ya está en preparación. Pueden ver el trailer subtitulado acá.
Calificación:
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No les voy a mentir, me re gusta Jon Bernthal como Punisher, pero casi casi diría que me gustó más su subtrama en la segunda temporada de Dardevil que su propia serie. No es que sea mala en lo absoluto, pero quizás tenía expectativas demasiado altas. Los villanos, por ejemplo, me parecieron totalmente genéricos y olvidables. No tienen el carisma y la potencia de otros antagonistas como Kingpin, Killgrave, Cottonmouth o Mariah Dillard. Y sí, entiendo que es importante generar empatía con Castle, pero basta de flashbacks cursis llenos de luz y sonrisas. Con uno es suficiente, gracias. No hace falta que cada dos por tres nuestro (anti) héroe se siente a rememorar cuán feliz era con su familia, creo que ha quedado más que claro. Por otro lado tiene momentos bastante logrados, como la historia del soldado con trastorno post-traumático, y admito que la insoportable de Karen casi llega a gustarme cuando está con él. Su compinche obligado, Micro, me cayó bastante bien, pero de Dinah Madani todavía guardo mis dudas. En general diría que me gustó pero que no me pareció tan genial como creí que sería. No está tan bien como otras producciones anteriores de Netflix, pero no es decididamente mala como Iron Fist y The Defenders (eventualmente los reseñaré como se merecen, pero son dos series tan malas que me da paja). Pueden ver el trailer sutitulado acá.
Calificación:
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Entre 1978 y 1995 todo Estados Unidos estuvo bajo la amenaza del que sería luego uno de sus más célebre asesinos: el Unabomber. La policía perdió años investigando pistas falsas, creyendo erróneamente que buscaba a un hombre violento y de escasa educación, y no al solitario genio criminal que en realidad era. Básicamente la serie nos cuenta la historia de James "Fitz" Fitzgerald, un agente de bajo rango que logró convencer a sus incrédulos superiores de que el perfil que habían hecho estaba mal. La historia oscila entre el pasado (la búsqueda de los sospechosos) y el presente (la lucha por evitar el juicio), haciendo hincapié en la importancia del manifiesto y las ideas políticas del Unabomber. La serie es bastante corta y entretenida, aunque no es una genialidad. Yo por lo general me engancho con todo lo que sea asesinos famosos/seriales, y esta vez no fue la excepción. La historia es ganchera, pero a veces es medio burda. Por ejemplo, en los momentos en que la serie quiere que sintamos empatía (casi lástima) por el asesino es muy obvia la manipulación emocional que quiere hacer. Y no me cierra eso. En ese sentido me quedo con Mindhunter, que no es tan maniquea y busca un acercamiento a los criminales de una forma infinitamente más sutil y mejor llevada. Ojo, aún así la recomiendo. Si les gustan los policiales y los casos reales se van a entretener un montón. Pueden ver el trailer subtitulado acá.
Calificación:
Black Lightning es un superhéroe de DC que ha caído en desgracia más de una vez, pero parece que ahora encontró su lugar. Basada en el cómic del mismo nombre, la serie nos cuenta la vida de Jefferson Pierce, un respetadísimo miembro de la comunidad de Freeland. Al comienzo de la historia nos enteramos que hace nueve años Black Lightning colgó el traje y se dedicó a mejorar las vidas de los ciudadanos de otra manera: no sólo es un padre ejemplar, sino que también es el respetado director de la escuela con más graduaciones de la zona y el único que mantiene un arreglo con las pandillas para que no ataquen en la zona escolar. Pero la violencia, las drogas, la trata de personas y la ineptitud de la policía empiezan a hacer de su barrio un infierno, y lo obligan a volver a luchar con la máscara puesta. Es menos Black Panther y más Luke Cage meets The Wire, si entienden lo que quiero decir. Si bien tiene algunos momento clase B (mayormente relacionados a los efectos especiales y algunos diálogos cursis), Black Lightning no tiene miedo de ser crudo y mostrar el lado feo de las cosas: discriminación entre personas de una misma etnia, tiroteos en las escuelas, prostitución forzada y una policía profundamente racista. En el momento en que escribo esto sólo salieron dos episodios, pero ya estoy enganchada y esperando por más. Como dato de color les comento que el villano es un actor negro que es albino, lo cual me resulta interesante porque es muy raro que los albinos tengan alguna representación en la pantalla, chica o grande, y da pie a interesantes reflexiones sobre lo que es ser negro o blanco en una sociedad tan violenta como esa. Pueden ver el trailer subtitulado acá.
Calificación:
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Urban fantasy es un género que a mi me encanta pero que hasta ahora no ha sido demasiado popular en cuanto a las adaptaciones audiovisuales. Lamentablemente Bright no es la película salvadora que yo esperaba. El punto de partida es bueno: elfos, humanos, orcos, enanos y otras razas salidas de LOTR conviven no tan pacíficamente en la ciudad de Los Ángeles. La corrupción, la delincuencia y las peleas entre bandas están a la orden del día, y falta poco para que todo explote. La trama es mitad Bad Boys/mitad película genérica sobre un elegido con poderes mágicos, y hasta ahí no tengo ningún problema, me gustan las de acción y las épicas así que para mí es un win-win. El tema es que caen en el mismo error que muchos otros: en vez de hacer una buena película con una trama sólida, que sea autoconclusiva, meten todo a presión, así nomás, y esperan que les vaya lo suficientemente bien como para hacer una segunda parte y ahí resolver todo. Eso fue lo que le pasó a The Amazing Spider-Man 2: Rise of Electro. Hicieron una secuela tremendamente floja porque estaban seguros de que la tercera parte ya estaba confirmada, y les fue tan mal que la cancelaron y dejaron todo a medias. Bright sería una muy buena serie, pero como película individual se queda corta. Ojo, esos no son sus únicos problemas. También hay otras cuestiones. Una, por ejemplo, es la normalización de la brutalidad policíaca. En un momento el personaje de Will Smith le pregunta a su compañero, el único polícia orco de la ciudad, repudiado tanto por sus compañeros como por los otros miembros de su raza, si realmente quiere ser un policía antes que un orco. El tema es que se lo pregunta mientras ambos ven como un grupo numeroso de agentes le da una paliza terrible a un orco tirado en el piso. ¿Qué pasa, para ser un policía hay que ser un hijo de puta? Parece que sí, porque la película da a entender que sólo podés optar por ser una cosa a la vez, y que ser parte de las fuerzas de seguridad implica abusar de tu poder. En fin. Otra cosa que me irritó fue que el personaje de la elfa Tikka es CALCADO de Leeloo, la protagonista de El quinto elemento. Es tan parecido que me da vergüenza ajena. No hay una justificación para que se comporte de esa manera, y encima a la mitad de la película descubrimos que puede hablar perfectamente. No hay ninguna explicación al respecto. Un hechicero lo hizo, supongo ¯\_(ツ)_/¯
En fin, lo más rescatable de la película es Noomi Rapace haciendo de villana. Es una lástima porque la idea es buena, pero la ejecución es flojísima. Veremos que pasa con la segunda parte, que ya está en preparación. Pueden ver el trailer subtitulado acá.
Calificación:
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No les voy a mentir, me re gusta Jon Bernthal como Punisher, pero casi casi diría que me gustó más su subtrama en la segunda temporada de Dardevil que su propia serie. No es que sea mala en lo absoluto, pero quizás tenía expectativas demasiado altas. Los villanos, por ejemplo, me parecieron totalmente genéricos y olvidables. No tienen el carisma y la potencia de otros antagonistas como Kingpin, Killgrave, Cottonmouth o Mariah Dillard. Y sí, entiendo que es importante generar empatía con Castle, pero basta de flashbacks cursis llenos de luz y sonrisas. Con uno es suficiente, gracias. No hace falta que cada dos por tres nuestro (anti) héroe se siente a rememorar cuán feliz era con su familia, creo que ha quedado más que claro. Por otro lado tiene momentos bastante logrados, como la historia del soldado con trastorno post-traumático, y admito que la insoportable de Karen casi llega a gustarme cuando está con él. Su compinche obligado, Micro, me cayó bastante bien, pero de Dinah Madani todavía guardo mis dudas. En general diría que me gustó pero que no me pareció tan genial como creí que sería. No está tan bien como otras producciones anteriores de Netflix, pero no es decididamente mala como Iron Fist y The Defenders (eventualmente los reseñaré como se merecen, pero son dos series tan malas que me da paja). Pueden ver el trailer sutitulado acá.
Calificación:
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Entre 1978 y 1995 todo Estados Unidos estuvo bajo la amenaza del que sería luego uno de sus más célebre asesinos: el Unabomber. La policía perdió años investigando pistas falsas, creyendo erróneamente que buscaba a un hombre violento y de escasa educación, y no al solitario genio criminal que en realidad era. Básicamente la serie nos cuenta la historia de James "Fitz" Fitzgerald, un agente de bajo rango que logró convencer a sus incrédulos superiores de que el perfil que habían hecho estaba mal. La historia oscila entre el pasado (la búsqueda de los sospechosos) y el presente (la lucha por evitar el juicio), haciendo hincapié en la importancia del manifiesto y las ideas políticas del Unabomber. La serie es bastante corta y entretenida, aunque no es una genialidad. Yo por lo general me engancho con todo lo que sea asesinos famosos/seriales, y esta vez no fue la excepción. La historia es ganchera, pero a veces es medio burda. Por ejemplo, en los momentos en que la serie quiere que sintamos empatía (casi lástima) por el asesino es muy obvia la manipulación emocional que quiere hacer. Y no me cierra eso. En ese sentido me quedo con Mindhunter, que no es tan maniquea y busca un acercamiento a los criminales de una forma infinitamente más sutil y mejor llevada. Ojo, aún así la recomiendo. Si les gustan los policiales y los casos reales se van a entretener un montón. Pueden ver el trailer subtitulado acá.
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